Hoy soñé con un loto de singular belleza. Tardé un instante en darme cuenta de que era la muerte y rápido la dejé entrar en mi morada para escuchar lo que tenía que decirme. Fue breve. Me dijo que sus manos llegaban a todo lo que existe además de a los vivos. A todo lo hecho por los seres humanos: edificios, instituciones, incluso sociedades...
Si te gusto esta noticia puede que te interesen estas..